Contra la repressión y por la libertad
El pasado 20 de noviembre día de las últimas elecciones generales comenzó aquí en Asturias una represión sin precedente con la masiva identificación de los integrantes de la manifestación organizada para felicitar a la banca, verdaderos vencedores de los comicios, y la posterior apertura de expedientes sancionadores con propuestas de multas de una desproporción absoluta.
Las posteriores múltiples identificaciones de miembros del 15M, realizadas con una evidente intención represiva y desmovilizadora, además de hechas mediante un no disimulado criterio selectivo, existiendo casos de agresión policial asociada a dichas identificaciones, como la sufrida de forma gratuita por dos de nuestros compañeros que tras haber denunciado dicho caso ante la autoridad judicial, se encuentran ahora pendientes de juicio.
Esta acción represora ha llegado a su máxima expresión el pasado 29 de marzo, jornada de huelga general donde previamente un compañero había sido detenido en los piquetes de por la mañana tras una carga policial, y fueron realizadas numerosas identificaciones de miembros del 15M que cometían el grave delito de expresarse libremente en la calle trasmitiendo a la ciudadanía la necesidad de apoyar la huelga no consumiendo en un día como ese.
Mediante un desproporcionado despliegue policial se nos impidió la incorporación desde nuestro lugar de convocatoria a la manifestación oficial, sin embargo los manifestantes siempre de manera pacífica conseguimos realizar dicha unión, tras este desbordamiento de la policía, varios agentes comenzaron a atacar a los manifestantes indiscriminadamente generando una nueva situación de tensión. Como resultado de dicha represión al menos seis compañeros y compañeras acabaron con lesiones y fracturas de diversa consideración que requirieron tratamiento hospitalario. Igualmente fue detenido un compañero que requirió igualmente atención médica hospitalaria tras los golpes recibidos y puesto en libertad aunque con cargos al día siguiente. Por el contrario los violentos agentes no recibieron en ningún momento agresión física alguna incluso tras la brutal represión ejercida por ellos y tras su desbordamiento, respetando su retirada lo cual demuestra la clara diferencia que nos separa y la evidente convicción en nuestros principios. No somos ni nos convertirán en gente como ellos.
Exigimos la asunción de responsabilidades por parte del Delegado del Gobierno, responsable final de esta acción policial que junto con los agentes que intervinieron violentamente sin la identificación obligatoria y que deberán de responder de sus actos ante la justicia ordinaria por esta injustificable acción, que en vez de velar por evitar incidentes, fue la generatriz de una situación de grave riesgo y responsable por tanto de las lesiones producidas a nuestros compañeros.
Durante el día de la huelga general del pasado 29 de marzo las muestras de la represión fueron múltiples en toda España siendo realmente importantes los hechos acaecidos en Barcelona donde fueron detenidas 56 personas, de las cuales tres son enviadas a prisión preventiva y una cuarta bajo una fianza de 4000 euros, quedando en libertad tras poderla pagar tras unos días encarcelado.
También varias personas son heridas de gravedad por las fuerzas policiales, resultando dos de ellas con pérdidas de visión y otras dos con el bazo destrozado, siendo todo ello silenciado por los medios de comunicación, los cuales, recibiendo órdenes de sus amos prefieren hablar de las escenas de caos en la ciudad, minimizando las razones políticas y económicas de la huelga y desviando la atención hacia una violencia creada única y exclusivamente por ellos y que califican sin sentido, obviando que los recortes brutales en materia de sanidad, educación, derechos laborales, etc. son los que provocan esta explosión de rabia.
Por ello exigimos la libertad inmediata y sin cargos de los compañeros encarcelados, así como el archivo de las causas pendientes contra todos y todas las compañeras represaliadas.
Una muestra mas de los tiempos oscuros que vivimos y que algunos creíamos equivocadamente olvidados, son las declaraciones del ministro del Interior, Jorge Fernández que ha anunciado que antes del mes de junio el Gobierno presentará el proyecto de ley orgánica de modificación del Código Penal. Entre las novedades está incluir la «resistencia pacífica» dentro de los «atentados a la autoridad» y que pase a ser penada entre uno y tres años de prisión.
El movimiento 15M quiere hacer saber a nuestros represores que no cejaremos en nuestro empeño de seguir luchando por la consecución de una libertad real, muy diferente al régimen que impera donde la única libertad que se nos tolera es la de consumir, y aceptar como inevitables unos recortes sociales y laborales y de las libertades generalizados siempre con la disculpa de una crisis que no nos cansaremos de repetir que no es una crisis sino una estafa.
Pese a todo esto el sistema represor no conseguirá su objetivo de conseguir que nuestro movimiento abandone uno de sus mas importantes elementos diferenciadores como es la utilización en todo momento de la acción pacífica. Por mucho que intenten criminalizarnos y estigmatizarnos como violentos tal y como parece ser la nueva estrategia gubernamental cara a desacreditar y reprimir al movimiento.
¡LIBERTAD!
